|
Yo
quería ser torero, torero,
y en el campo me sentía torero,
y los toros me encontraban torero.
Pero un día me encontré
frente a frente con un toro,
y en su cara le noté
que no era como todos.
En cada lance me vió la cara,
y en un momento pensé que hablaba.
Estribillo,
2 veces:
El toro, el toro, el toro
podía ser semental,
ser semental,
y engendrar toritos fieros.
Toros de casta racial,
bravos para torear,
y aunque no sepan hablar
pregunten sin preguntar:
"¿adónde están los toreros?
¿adónde están los toreros?"
Esa
tarde me dijeron: Torero,
ten cuidado con el toro, torero,
que es un poco traicionero, torero.
Cuando quise rematar
mi faena con la espada,
no me pude perfilar...
Algo extraño me pasaba.
Y yo, torero, tiré la espada
al ver el toro cómo lloraba.
Estribillo.
|
|