Un revuelo de palomas en sus manos,
Azabaches en su cola y en su crin.
En su cara dos luceros estampaos
que parecen de platino y de marfil.
Mi caballo tiene fama,
lo conocen por su genio en las corrías.
Sin clavarle las espuelas,
a los toros en corbeta desafía.
Estribillo:
Vaya caballo que tengo,
más negro que el cordobán.
Brilla la luna en su pelo
como el faro de la mar.
Se criaba por los montes,
y en la orilla de los ríos.
Y en el campo ni en las plazas,
no hay caballo como el mío.
Cuando corre mi caballo
por la dehesa,
en sus patas ponen alas de color.
Y las flores van doblando la cabeza
cuando pasa mi caballo emperador.
A los toros en la plaza
los alegra con arranques de pelea.
Galopando frente a frente,
se defiende y después caracolea.
Estribillo. |