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A la
boda, boda,
mi flor castellana.
Con traje de novio
vendré una mañana.
A la boda, boda
pues soy molinero
y voy a decirte
lo bien que te quiero.
Mi novia manchega
de miel y de trigo,
yo quiero casarme,
casarme contigo.
Mi cariño al tuyo
tan bien se acomoda
que voy a cantarte
a la boda, boda.
En
un rincón castellano,
con sol de verano
te hable un mañana.
Y desde aquel punto y hora
la luz de la aurora
yo ví en tu mirada.
Qué bonita eres,
mi rosa de abril.
Dime si me quieres
igual que yo a ti.
Estribillo:
Ay lerén, en mi sién
tu querer de rondón
se ha metío.
Ay larán, con qué afán
a tu amor, corazón,
me he rendío.
Que dulce veneno
me dió tu mirar
que me fui tras de ti
porque a mí lo moreno,
a mí lo moreno
me gusta a rabiar.
En
el cariño, tú sabes,
no existen las llaves
ni existen razones.
Y aunque eches siete cerrojos
se mete en tus ojos
por los cora
Tienes un aroma
de nardo y azahar.
Sígueme, paloma,
a mi palomar.
Estribillo.
Ay,
lerén,
ay qué bien te quiero yo.
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